
Hay muchas clases de lujo, uno sirve para presumir de lo bien que nos ha ido la vida, otro para subir a lo mas alto a nuestros ídolos, otro para demostrar quién es el que manda, y otro simplemente para hacer ver lo que no hay.
El lujo material es el más admirado y al que más importancia le damos, aunque creamos que no, es cierto nacemos en una sociedad totalmente materialista y eso nos hace ser egoistas y comenzamos a discriminar a la sociedad que no está a la altura de nuestro poder adquisitivo.
Pensamos que por nuestra escala social tenemos ciertos privilegios, pero todos ellos son materiales, y eso nos despista dejando abandonado el verdadero lujo, el lujo de la inteligencia y sabiduría.
Rebeca Castaño Valbuena.